Ida y alejada manejas muy bien la distancia, ubicando barreras de cera has tapeado tu estancia, te escondes de lo que verdaderamente sientes, del deseo que carcome tu alma, te niegas a la verdad, te aferras a una falsa estabilidad, tus muletas son de cartón y tras cualquier sacudón se desarman, se lo que piensas, puedo oler tu anhelo y saborear tu suave piel aunque te cubras con costosas tallas, vuelve que este es tu lugar, deja de engañar a la razón y de lapidar el corazón, justo aquí vives y aunque lo niegues siempre aquí te has quedado.
No sabe el nuevo ser todas las noches de secretos placeres y brotes de amantes en delirio que surcaron cada resquicio de nuestros ser, no sabe de halagos y de toques mágicos que evocan incalculable placer. No sabe que tu pasado lo arme tallando cada pieza de manera que acoplase solo a mí ser, que tu entrega fue la mía y hoy en día sigue siendo única, que volaste de la jaula de barrotes retorcidos y fuiste libre sin saberlo.
Volverás, es lo que siento y es lo que veo, volverás cuando ya te quedes seca y envejecida y sabrás que solo junto a mi todo tiene sentido.
Magistral
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